

Ahora que los meses invernales van quedando atrás, es hora de que los runners que han estado hibernando durante el frío desempolven sus zapatillas y vuelvan a pisar el asfalto. Para la mayoría, las primeras carreras tras una larga pausa son las más duras. Por eso, hemos reunido una serie de consejos que te ayudarán a recuperar el ritmo más rápidamente.
Incentivos, juegos mentales, motivación: cualquier cosa que te anime a volver al asfalto tras un tiempo de descanso. Con el verano a la vuelta de la esquina y las temperaturas en alza, es el momento de olvidar las excusas y salir a correr. A continuación, te mostramos algunas de las formas más eficaces para retomar el hábito y hacer que esa primera carrera (la más dura) no se haga tan cuesta arriba. Léelas todas, elige las que creas que te van a funcionar y ponte en marcha.
Al igual que los propósitos de Año Nuevo, fijarse un nuevo reto para la temporada de running que comienza puede ser la motivación perfecta para volver a correr (aunque solo sea durante los primeros meses). Hay estudios que demuestran que quienes hacen un seguimiento de sus progresos hacia su objetivo tienen más probabilidades de alcanzarlo. Lo mismo ocurre con quienes hacen públicas sus metas. Una forma fácil de hacerlo es mirar tus tiempos o distancias antes de la pausa invernal y elegir uno en el que centrarte, como una nueva marca personal de 10 km. A continuación, anuncia tu tiempo objetivo en una plataforma para corredores como Strava (únete a nuestro club aquí) para hacerlo público. Con una meta bien clara, tienes algo a lo que aspirar y cada carrera que hagas te acercará más a conseguirlo.
Si lo tuyo no son los tiempos o las distancias, apuntarte a una carrera puede ser igual de motivador. O puedes buscar un evento de running en Internet. Pídele a un amigo que se apunte y tendrás motivación y alguien a quien rendir cuentas: una receta para el éxito.
Cómo correr una carrera virtual
Correr una carrera virtual plantea muchos retos, desde los más mundanos hasta los más cruciales. Hay cuatro áreas principales en las que necesitarás tenerlo todo a punto.
Otro buen punto de partida después del invierno es asegurarte de que tu equipación de running está a la altura. Si tus zapatillas están demasiado usadas o tu ropa se ve anticuada, actualizar tu look podría ser justo lo que necesitas para arrancar de nuevo. Hay estudios que demuestran que el rendimiento puede mejorar simplemente si sientes que tu aspecto es el adecuado, así que utiliza esto en tu beneficio y crea un incentivo extra para volver a lanzarte a recorrer kilómetros. Después de todo, querrás poner a prueba ese nuevo par de zapatillas. Para ver las novedades que quizás hayas pasado por alto en lo que a equipamiento de running se refiere, visita nuestro buscador de zapatillas y descubre qué te puede interesar.
Tener a alguien que te acompañe puede ser otro gran incentivo para volver a correr después del invierno. Con otra persona que te apoye y te obligue a correr cuando dices que lo harás, será más fácil convertirlo en parte de tu rutina, además de una gran oportunidad para socializar y ponerte al día.
Ya tienes la ropa puesta y has salido a por todas, pero la transición de caminar a correr después de la pausa del invierno está resultando más difícil de lo que creías. Para ayudarte a encontrar tu ritmo de carrera, escuchar música puede ser la mejor manera de acelerar ese paseo y hacer que tus piernas quieran comerse el asfalto.
20 minutos es todo lo que necesitas para romper el hielo. Una vez terminada, los expertos dicen que debes anotar todos los detalles de esa primera carrera de vuelta. Tu tiempo, tu frecuencia cardiaca, la distancia y cómo te sentiste (muchas aplicaciones para correr te permiten escribir una nota junto a los datos de tu carrera). De este modo, tendrás una base sobre la que empezar a progresar, y la próxima vez que corras podrás comparar los datos con esa primera carrera. Deberías ver una mejora en todos los aspectos cuando salgas la próxima vez y esto te dará la motivación que necesitas para continuar. Te darás cuenta de lo rápido que puedes volver al nivel que tenías antes del invierno y seguir corriendo hacia tus objetivos y hacia el verano.
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A partir de ahora, todo depende de ti. Las razones para correr superan con creces a todas las que retienen, y ahora que hace buen tiempo, el running te llama.